Un Open House, o puertas abiertas, es una estrategia de marketing que busca que el inmueble «entre por los ojos». Da cercanía y permite aclarar dudas, por parte de los potenciales compradores.
El primer país en el que se adoptó esta forma de vender, fue Estados Unidos. El objetivo es que el vendedor abra las puertas de la propiedad en venta, por todo un día. Durante este periodo, cualquier persona interesada puede entrar al ver el inmueble.
Las viviendas se acondicionan para esto, buscando que la experiencia del potencial comprador sea la mejor. Para esto, se utilizan adornos, comido y música ambiental.
En una visita tradicional, el potencial comprador agenda una cita con el agente inmobiliario, para un día y una hora específicos. En el caso de un Open House, el cliente tiene la oportunidad de conocer la propiedad a la hora que desee, durante todo un día.
La clave está en hacerlo de manera profesional, para que la estrategia tenga éxito. El objetivo de esta estrategia, es lograr la venta en menor tiempo. Es una forma diferente y novedosa de vender una propiedad. Se trata de un formato, que ha ido tomando fuerza con el tiempo.
¿Cómo se hace un Open House?
Lo primero es definir una fecha. Los fines de semana son ideales, ya que las personas tienen más tiempo. El agente inmobiliario debe invitar a los potenciales clientes, interesados en el inmueble.
Es muy importante dar visibilidad al Open House, promocionarlo. Esto se puede hacer a través de las redes sociales, apoyado con medios gráficos. También se puede hacer mención del evento en el sitio web de la inmobiliaria, y enviar una invitación a la lista de correos. Otra estrategia común, es hacer una oferta específica para cierre de negocios ese día.
Para los clientes que visiten el inmueble, se recomienda tener preparado algo para que puedan degustar. Esto hace que la visita tenga otra connotación, y que la experiencia del potencial cliente sea especial. Otro punto esencial, con el mismo fin, es tener la casa limpia. Se puede incluso utilizar muebles y adornos, para que el lugar se vea más atractivo, y ayude a que las personas se imaginen viviendo en él.
Es importante que la primera impresión invite a conocer más. Se puede aprovechar el marketing sensorial, con estímulos visuales, olfativos, auditivos, y táctiles. La atención al cliente, será clave para el éxito del Open House.
El agente inmobiliario, debe recibir a todas las personas que vayan llegando. Se recomienda que el dueño de la vivienda, no esté presente, al igual que recopilar la información de cada potencial comprador. Se deben aclarar todas las dudas de las personas que asistan, generando cercanía y confianza. Dejar al alcance tarjetas de contacto o material gráfico para el visitante, es también una excelente idea.
Principales ventajas de un Open House
- Permite al agente inmobiliario ahorrar tiempo, ya que puede concentrar las visitas dentro de un mismo periodo de tiempo.
- Se puede reflejar la demanda del inmueble, generando una sensación de urgencia en los potenciales clientes.
- Se evita la posibilidad de que la persona que coordinó visita, no llegue a ésta.
- El cliente puede revisar la casa con más detalle, tiempo y tranquilidad. Hay espacio para que pueda imaginarse viviendo en el inmueble.
- Los visitantes tienen acceso a aclarar sus dudas directamente con el agente inmobiliario. Pueden incluso llevar definidas sus preguntas.
Preguntas frecuentes en un Open House
- ¿Por qué está en venta la propiedad?
- ¿Hay algún problema con la propiedad?
- ¿Cómo es el sector en que se encuentra?
- ¿Cuánto cuestan los servicios básicos?
- ¿Cuánto tiempo lleva en venta la casa?
- ¿Cuántas ofertas se han recibido?
- ¿Ha habido cambios en el precio?
Open House virtual
Con todo lo que ha pasado a lo largo de la pandemia, se han incorporado herramientas que permiten hacer un Open House virtual. Esto se puede realizar a través de herramientas como Zoom, Teams o Skype. En este caso, el agente muestra de manera online la propiedad. Es bastante práctico, ya que se puede atender a un grupo de personas definido, responder dudas, y ahorrar tiempo.
La estrategia del Open House, es también una oportunidad para la agencia inmobiliaria. Se pueden captar nuevos clientes, aumentar la visibilidad de la empresa, convirtiéndose muchas veces en la carta de presentación de la empresa.
